CALDO REMINERALIZANTE PARA EL INVIERNO

caldo remineralizante

Caldo RemineralizanteCaldo remineralizante para el Invierno.

Caldo remineralizante.

El invierno es una estación estación del año muy fría y húmeda. Es necesario para esta época del año, mantener nuestro cuerpo con calor y por tanto en cuanto alimentación se refiere, evitar zumos y bebidas frías, y aumentar por tanto el consumo de sopas, caldos e infusiones.

Este caldo por su gran contenido en sales minerales y fermentos tiene un efecto remineralizante, diurético y que ayuda a regenerar nuestra flora intestinal.

Este caldo remineralizante tiene efectos muy positivos en nuestro organismo, actuando en todos los niveles:

  • Ayuda a equilibrar la energía digestiva, facilitando buenas digestiones.
  • Como diurético, ayuda en la retención de líquidos.
  • Como depurativo, desintoxica nuestro organismo.
  • En procesos gripales, ayuda a calentar el organismo y alcalinizarlo; en osteoporosis por su alto contenido en minerales y en estados de anergía.

Ingredientes caldo remineralizante:

  • 1litro de agua a ser posible mineral o filtrada
  • Varias hojas de acelga
  • Varias hojas de col verde
  • 1 cebolla partida
  • 1 puerro
  • 2 zanahorias
  • 2 ramas de apio
  • 1 nabo
  • 1 tira de 10cm aprox. de alga wakame
  • 1 tira de 10cm aprox. de alga kombu
  • Miso ( 1 cucharada por persona aprox. )
  • perejil fresco o cebollino fresco

Las verduras pueden variar en función de la temporada y la cantidad de miso es variable según gustos, ya que podemos hacer el caldo más o menos fuerte/suave de sabor. Puede encontrarlo en su herbolario más cercano.

Preparación caldo remineralizante :

Se coloca en una olla el agua con las verduras troceadas y las algas. Se hierve treinta minutos a fuego lento.

Por cada ración se añade una cucharadita rasa de miso y se añade un poco de perejil fresco cortado o cebollino. (No disolver el miso cuando esté hirviendo)

Es recomendable tomar el caldo remineralizante dos veces al día, como una media hora antes de las comidas. Se puede conservar en la nevera durante dos o tres días.